La ecografía ha avanzado mucho y ya se encuentra a la altura de los retos del diagnóstico por imagen del siglo XXI. Con la Inteligencia Artificial (IA), consigue aportar un valor añadido en el diagnóstico de diferentes lesiones como las de mama.

 

 

Los profesionales que trabajan en radiología son conscientes del poder del diagnóstico por imagen, importante para guiar las decisiones de atención médica. La técnica ha avanzado mucho en los últimos años tras abordar ciertas debilidades tradicionales basadas en la dependencia de las habilidades del operador y en la calidad de imagen. Ahora, con la IA tiene un nuevo futuro.

 

 

 

 

 

 

Utilizar la IA para el cribado de ciertos tipos de cáncer puede agilizar y ofrecer una alta precisión en el diagnóstico. Para ello utilizan diferentes técnicas que han hecho que el potencial de las herramientas de Inteligencia Artificial para su aplicación en el cáncer de mama va mucho más allá de sus posibilidades en el diagnóstico de imagen.

 

 

Dentro de esta amplia variedad hay modelos de IA capaces de generar conocimiento derivado del análisis de los genes tumorales; así como existen herramientas que están siendo utilizadas para acompañar al médico en la toma de decisiones.

 

El potencial de las herramientas de IA para su aplicación en el cáncer de mama va mucho más allá de sus posibilidades en el diagnóstico de imagen. El camino acaba de empezar.