Predicciones en el sector de la salud. ¿Realidad o ficción?
La Inteligencia Artificial se ha utilizado, y aún se sigue haciendo, para ayudar en lucha contra el coronavirus y es una importante opción para resolver algunas cuestiones de esta crisis sanitaria.
Desde los primeros momentos de la pandemia, científicos, médicos, gobiernos e instituciones han generado e intercambiado datos. La Inteligencia Artificial (IA) y el Big Data han jugado un papel fundamental.
¿En qué momento la IA empezó a cobrar protagonismo en esta crisis sanitaria? BlueDot, una plataforma de inteligencia artificial, comenzó a alertar de la posible crisis a finales del pasado año, justo antes de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) dijera que se había descubierto un nuevo coronavirus.
Si bien los modelos epidemiológicos se utilizan desde hace tiempo, gracias al Big Data estos modelos son capaces de realizar predicciones cada vez más precisas. Los sistemas de geolocalización, las redes sociales, son herramientas que han ayudado a su desdarrollo.
IA y Big Data juntas han sido capaces de demostrar su capacidad para predecir la incidencia de los brotes. Y en un contexto donde el desarrollo de una vacuna eficaz contra la Covid-19 es fundamental, la inteligencia artificial está ayudando a agilizar los procesos y reducir los tiempos habituales de desarrollo de una vacuna.
Predictor salud en Colombia
Según la publicación E-Health Reporter, el Instituto Nacional de Salud de Colombia cuenta con un nuevo aliado de predicción en salud, Predictor Salud, una herramienta digital que busca predecir “el comportamiento de eventos en salud pública y el impacto de las intervenciones”.
El objetivo de Predictor Salud es conocer de antemano las dinámicas de los eventos en salud pública y, así, evitarlos o mitigarlos, aseguran fuentes del Instituto Nacional de Salud de Colombia, que añade que “planear políticas públicas en salud pública que tengan alto impacto y representen experiencias exitosas” es posible, pero “requiere de un análisis y cruce cuidadoso de cientos de variables, sea cual sea la problemática a analizar”.
Para conseguirlo, utiliza un modelo basado en MBA, es decir, un tipo de modelo computacional empleado para la simulación de interacciones individuales y colectivas, a fin de lograr una evaluación de sus efectos en el sistema. Esta clase de modelos logra desarrollar patrones de conducta y la composición de un sistema.
Otro elemento importante de este sistema es que se pueden producir sinergias entre actores y pueden ayudar a reducir las brechas de conocimiento en la relación nación-región.
