La  Inteligencia  Artificial ha supuesto una nueva gran ola de la digitalización en las organizaciones.

La ejecución automatizada de tareas sofisticadas y de alto valor añadido abre unas posibilidades hasta ahora insospechadas para las empresas, pero también para una sociedad expectante sobre lo que está por llegar aseguran los autores del estudio ‘Informe Ascendant de Madurez Digital. La edición 2024, “Inteligencia Artificial: La revolución que está cambiando los negocios y el sector público’ que  analiza el grado de madurez de las organizaciones en la adopción de la Inteligencia Artificial (IA).

Según estos datos, el 90% de las organizaciones entrevistadas no cuenta con un Plan Estratégico de Inteligencia Artificial definido.

Sin embargo, el 30% está en proceso de definirlo y alinearlo con su Plan Estratégico Corporativo en el medio plazo.

 La información proporcionada por las organizaciones participantes en el estudio nos permite concluir que partimos con un bajo nivel de madurez en IA y el reto es impulsar a gran escala su adopción en las organizaciones.

A pesar de ello, el impulso que ha supuesto la irrupción de la IA generativa y la consolidación de la nube como base tecnológica para su desarrollo representan una oportunidad para empresas y entidades públicas que quieran diferenciarse mediante un gobierno efectivo del conocimiento y un uso responsable de la IA.  

Actualmente, el foco de las organizaciones está en los casos de uso para la mejora de las operaciones y las relaciones con los clientes.

Según el informe, existe aún un bajo nivel de madurez generalizado en la adopción de la Inteligencia Artificial.

Como estrategia,  Predomina la prudencia alrededor de la Inteligencia Artificial: el 69% de las organizaciones habrá definido a medio plazo su estrategia de transformación hacia Organizaciones Orientadas a la Inteligencia Artificial

Algunas conclusiones

Las organizaciones han empezado a adquirir conciencia sobre como el uso de la Inteligencia Artificial va a influir en su posicionamiento, qué ventajas competitivas puede aportar y como será un pilar relevante dentro de su Plan Estratégico. 

 La mayoría de las organizaciones se encuentran en una fase inicial respecto al cumplimiento normativo, para adaptarse tanto a las presentes como a las futuras normativas que puedan surgir en este aspecto.

 Algunas organizaciones han incorporado talento experto en ética en sus equipos de desarrollo, asegurando que se aborden las implicaciones éticas en todo el ciclo de vida del modelo de Inteligencia Artificial.  

Dada la sensibilidad de los datos que se emplean en aplicaciones de la Inteligencia Artificial, las organizaciones están empezando a mejorar sus políticas de privacidad de la información. 

Lo más preocupante es que la IA representa un desafío único para las organizaciones, ya que para la toma de decisiones automatizada hay que velar por la seguridad de los datos y la eliminación de los sesgos en los modelos. Menos de un 10% de las organizaciones están preparados para evitar estos riesgos.