L a tecnología solo es el principio.  Contar con los programas adecuados para procesar imágenes es fundamental para la detección precoz de enfermedades como el cáncer.

El diagnóstico de imágenes gana cada vez más relevancia. Con el impulso conseguido tras la pandemia y el auge de la telemedicina, es un sector que está ganando importancia y que requiere cada vez más tecnología. La inteligencia artificial (IA) no ha sido ajena a este mercado y es capaz de llegar allí donde no puede el ojo humano.

La IA puede considerarse como uno de los más importantes beneficios para especialistas como los radiólogos al ayudarle a mejorar los flujos de trabajo. Puede conseguir una mejor interpretación en el análisis de imágenes, generar un tratamiento a tiempo y contribuir al diagnóstico precoz de algunas enfermedades como el cáncer. 

En esta área de la medicina permite al especialista conseguir resultados más certeros gracias a la IA y su capacidad predictiva, pero el especialista siempre será quien tome la decisión final en el diagnóstico.