Construir hospitales, ¿un negocio rentable en Latinoamérica?

L as infraestructuras sanitarias son muy necesarias, pero al mismo tiempo, ¿pueden ser un «negocio» rentable?

 

Las infraestructuras sanitarias son muy necesarias, no solo ahora, que vivimos -esperemos- los últimos coletazos de la pandemia que ha generado el Covid-19, sino en el futuro. Por este motivo hay empresas que se dedican a la construcción de infraestructuras sanitarias. Estas compañías lo hacen y esperan un beneficio económico. Entonces, ¿es un buen negocio dedicarse a la construcción de hospitales? 

 

Son varias las empresas que actualmente gestionan infraestructuras sanitarias en Latinoamérica. Desde la mejora de los centros ya existentes, dotación de nuevos equipamientos o construcción de hospitales nuevos, son muchas las oportunidades que se abren a las empresas que quieran contribuir a mejora la situación sanitaria de la región.

 

Argentina, Costa Rica, Panamá o Chile son solo alguno de los ejemplos de países que están renovando sus infraestructuras sanitarias, y otros países también están siguiendo su ejemplo. En el caso de Chile, varias empresas españolas se han adjudicado la construcción de nuevos hospitales en el país, y de hecho según fuentes gubernamentales, se espera que a finales de año se hayan finalizado 22 nuevos hospitales.

 

 

Contar con un socio local, fundamental
 
 
 
El sector hospitalario está en alza y cada vez va a ser más necesario contar con nuevos centros. Está claro que construir un hospital no tiene porqué suponer un negocio arriesgado. No obstante, tener contactos con los socios locales es fundamental, al igual que lo es contar con otros partners con los que iniciar esta aventura, ya que no resulta nada fácil acometer la construcción de un nuevo centro, cuyo coste puede rondar en torno a los 200-260 millones de dólares.
 
 
 
Hay que contar con un respaldo económico, pero los beneficios pueden ser importantes. En  resumen, siempre van a ser necesarios nuevos centros hospitalarias ya que contribuyen al bienestar de la población y porqué no, pueden ser una buena inversión. Pero siempre teniendo en cuenta que la salud lo es todo y el paciente es el destinatario de toda esta inversión. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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